Cosmología de nuestra coincidencia...

Las coincidencias y demás temas de probabilidad en la matemática de nuestro paso contigüo me han hecho tratar de dilucidar una teoría que tenga que ver con las causas y consecuencias de este destino que nos ha traido y nos atrae de nuevo.

Infinitas las posibilidades de cada una de nuestras acciones, y más aún, si contamos la infinitecimal probabilidad de que hoy tú y yo estemos viviendo esto, que estoy convencido que nos va a llevar muy lejos y juntos.

Pensar en las infinitas circunstancias para que estemos aquí, yo escribiéndote y tu leyéndome, confirman mi teoría de que hay ocasiones en que el Universo conspira a favor o en contra de nosotros. En este momento, estoy seguro de que esa conspiración probabilísitca está conspirando a nuestro favor. Los dos tenemos mucho que ganar de esto, tan sólo tenemos que probar que somos capaces de llevar a cabo nuestro destino... Ahora, seguramente te estarás preguntando, mi queridísima lectora, ¿cuál es ese endemoniado destino? Pues te lo contestare lo que he aprendido hasta ahora: no lo sé. Tan solo he podido descubir que es una fuerza que nos ha atraido en muchos sentidos: en el físico, el intelectual, el emocional, y en ciertos momentos el espiritual (momentos que sinceramente espero que vayan creciendo y que inevitablemente han sucedido así en crecimiento).

Simplemente el hecho de que tú te hayas topado conmigo y yo contigo en un lugar en el que nunca, ni remotamente, pensé en vivir. Ahora, también le tenemos que aumentar al grado de dificultad que presenta el que exista una conexión como se ha realizado hasta hoy, y más que en cierto espacio y tiempo hemos sentido que no se necesita nada más y que hemos buscado la prolongación del momento en un ente perpétuo sin manecillas de segundos, minutos ni horas. Y esto es apenas el principio.

Todo se va multiplicando exponencialmente si vemos que además, en los momentos de coincidencia hemos encontrado que esa conspiración nos ha llevado a las palabras, y a los espacios inventados, donde tu entender y mi comprender se han unido en una simbiosis coincidente en lo que buscamos de la vida.

Cuántos átomos, moléculas, partículas y demás han tenido que existir y dejar de hacerlo para que estemos aquí. Han tenido que existir muchas cosas y muchas otras han tenido que dejar de existir para que estemos aquí, juntos, quizá en la antesala de ese vuelo. Entre las existencias y ausencias, entran también muchas otras personas que irremediablemente han cruzado y nos han dejado huella, pero que ya no están y que solo estuvieron para que cuando se presentara la oportunidad la sepamos tomar. Por esto y por muchas otras cosas en las que no podrás negar la "mano negra" de el Universo y muchas más que me faltan por comprender y descubir es como me he decidido a compartirte este conocimiento. No quiero que tomes decisiones, tan solo me gustaría saber si tú, en algún punto de tu trayecto has sentido esto.

Ahora, te comento, tomando en cuenta todas estas múltiples coincidencias, y aprendiendo de lo mucho que me ha enzeñado la vida, te voy a firmar lo siguiente: No dejaré de buscarte. Esto porque me has hecho que me pregunte lo siguiente: ¿Que hacer cuando descubras el mayor tesoro de tu vida? - no me quiero responder: "lo dejé pasar". ¿Cómo puedo estar seguro de que tú eres ese tesoro? Pues tan solo hay que conocerte un poco. He mirado una parte de tu corazón y me ha sido suficiente para darme cuenta de que te quiero descubrir completamente.

He visto tus ojos, y me quiero quedar en tu corazón....